Aquel tren del frigorífico


Durante casi un cuarto de siglo la Margen Sur del Río Grande contó con un ferrocarril que unía la Plata del Frigórifico con la Estancia José Menéndez.


El tendido permitía acercar fundamentalmente fardos de lana hacia ese muelle, y llevar de vuelta provisiones.


El destino original previsto en el proyecto de autorización dado a la Compaía Frigorífica Argentina tenía otra dimensión, y debía llevar animales congelados entre la planta y barcos de varaban en invierno para recibir la carne que tomaba rumbo europeo con los caponeros.

Roberto Chenú docente de la Escuela 4, alentó a fines de los 80 una investigación entre sus alumnos, que encerraba los siguientes enunciados:

HABÍA UNA VEZ UN TREN es una pequeña historia de un pueblo grande, mi pueblo, situado en la costa atlántica de Tierra del Fuego: Río Grande.

Sucedió alá por 1917, años más o años menos...¡Ya nadie lo recuerda!

Quizá porque lo heroico era cosa de todos los días y la preocupación era vivir.

Viviendo levantaron casas, tuvieron hijos, y hasta trajeron un tren.

¡Hicieron PATRIA!.. LA PATRIA grande que hoy tenemos a la vista.

A los pioneros, con nombre y sin él vaya este homenaje.

Y allí se colocaba la firma de JK, pseudónimo que usaba entonces, JUAN KAIKEN.


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UNO POCO DE HISTORIA: El tren estaba constituido por una locomotora  a vapor, posiblemente marca KOBEL, alemana, que arrastraba una docena de pequeños vagones descubiertos, sobre rieles de "trocha angosta".
El tren transportaba fardos de cuero y lana deesde la entonces estancia PRIMERA ARGENTINA, actual José Menéndez, hasta el muelle del Frogorífico CAP.
Según testimonio  de antiguos pobladores la máquina y vagones fueron llevados a la Ciudad de los Niños en la Provincia de Buenos Aires, durant eel gobierno del General Perón, donde actualmente se encontrarían funcionando.

DESDE LA BIBLIOTECA : Con alumnos de la Esc.4 se invstigó el tema, recatando en el lugar algunos DURMIENTES de hierro, clavos y tornillos antiguos; se oibservó el terraplén y restos de un puente. El testimonio de viejos pobladores fue grabado en cierntas y las fotos tomadas se encuentran agrupadas en un audiovisual tituado: HABIA UNA VEZ UN TREN.


La foto nos muestra como al finalizar la temporada el tren dejaba de ser vehículo de carga y comenzaba llevar la población golondrina que saldría del puerto buscando su lugar de invernada fuera de la Tierra del Fuego.


Con los años, y en razón del destino que se le dio a la mencionada máquina, supimos que había sido dada de baja en la REPUBLICA DE LOS NIÑOS de Gonnet, lugar a donde llegó como un donativo a la FUNDACIÓN EVA PERÓN.

Y hay una disposición que documenta estos destinos.

Incorpórase al Patrimonio de la Comisión Nacional de Lisiado un Tren en Miniatura

Resolución Nro. 1.866. Agosto 11 de 1960.
Visto el expediente nro. 16.774/59 y agregados, que se relacionan con el reclamo formulado por el señor Alberto E. Colombaro, quien invocando su carácter de propietario solicita la devolución de un tren en miniatura de tracción a vapor que se hallaba instalado en la ex Ciudad Infantil; y

CONSIDERANDO:
que la Dirección General de Asuntos Jurídicos, en sus dictámenes números 44, 371 y 938, de fojas 31, 33 y 38/39, respectivamente, se expide en el sentido de que del análisis de la documentación y elementos de juicio agregados el recurrente habría sido el diseñador y constructor del mencionado tren, hecho que no es suficientemente demostrativo, ni puede ser tomado en consideración para justificar el carácter de propietario que invoca;
que, de acuerdo a lo aconsejado por la Dirección General de Asuntos Jurídicos en los referidos dictámenes, correspondería en consecuencia incorporar al patrimonio de Estado los bienes de referencia y desestimar el reclamo formulado por el interesado;
por ello, y atento a lo manifestado a foja 40 por la Delegación Fiscalía del Tribunal de Cuentas de la Nación, el Ministro de Asistencia Social y Salud Pública resuelve:

Artículo 1º - Incorpórese al patrimonio de la Comisión nacional de Rehabilitación del Lisiado el tren a vapor en miniatura que se hallaba instalado en la ex Ciudad Infantil, cuyo valor total estimado asciende a la suma de trescientos cincuenta mil pesos moneda nacional (350.00 m/n), compuesto de los siguientes elementos:
Locomotora construida de hierro y madera, pintada de color negro, de m. 1,30 de largo x 0,59 de alto x 0,30 de ancho, con 6 ruedas de hierro de 0,22m de diámetro y 2 ruedas de 0,12m de diámetro con número 747 aplicado en relieve sobre ambos costados de la cabina. Ténder construido en chapa de hierro y madera de color negro con 8 ruedas de hierro de 0,12m de diámetro con las letras ABC pintadas en ambos costados. Con tendido de 250 metros de rieles dobles adaptables con trocha de 225mm aproximadamente.
Art. 2º - Desestímese el reclamo formulado por el señor Alberto E. Colombaro, tendiente a obtener la devolución del tren en miniatura y sus accesorios que se encuentran actualmente depositados en la Comisión Nacional de Rehabilitación del Lisiado.
Art. 3º - Regístrese; publíquese en el BOLETÍN DEL DIA y pase para su conocimiento y efectos a la Comisión Nacional de Rehabilitación del Lisiado; cumplido, vuelva a la Dirección General de Administración para su posterior trámite – Noblia.




Internet que hoy facilita tanto nuestra curiosidad, nos ofrece un lugar que multiplica la información que aquí pudimos dar: http://www.ferrocarrilesenelconosur.co.uk/08Scriogrande.html









1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Mingo!

¡Los documentos visuales que se presentan son valiosos verdaderamente! Mucho se sabe del tren del sur fueguino, aquel que se hizo famoso con el tiempo, y está bueno también dar a conocer aspectos de aquel otro, el del norte, referencias al tendido de vías en aquella zona, su utilización.

Mirko Milosevik, nació en 1909 en Punta Arenas, y llegó a Río Grande el 21/10/1925: “Paré en la casa de don Esteban Kovacic, en el Hotel Miraflores. Ahí pasé una noche. Al otro día me fui al Frigorífico (...). En esos tiempos estaba la Compañía Frigorífica Argentina y de administrador estaba el señor John Goodall”. Mirko recuerda: “(...) Venía el muelle antiguo y más al frente la Subprefectura, que era una casita de zinc y madera (...). Más atrás estaban los galpones de la María Behety, donde guardaban los fardos. Está todavía ese galpón, pero hecho tipo gamela ... De ahí sacaban los fardos, los subían a una zorra y los subían al muelle. En el año 1925 empecé a trabajar en la cocina-restorán de carnicero, y después pasé a la administración de mozo, cuando estaba el señor Goodall (...). Después de un año pasé a la casa de los empleados, porque cuando se acababa la faena había poco movimiento, y ahí estuve trabajando cinco años de mozo en esa casa.¡Después de ahí, salí para hacer otra vida! Ya no me gustaba nada de mozo ni nada y salí acá a trabajar a la cuadrilla general. Se hacía todos los trabajos de la fábrica; el desembarque de mercaderías que se llevaban al galpón de los cueros, donde se depositaba la lana y la mercadería que iba para las estancias. Después venía el tren de la José Menéndez a buscar mercadería y a traer fardos, porque escaseaban para la época del embarque. Se llevaban al muelle y se descargaban ahí”.

Por otro lado, Emilia Susic de Bonifetti recuerda: “(...) Frente a la Prefectura creo que queda el galpón de los Menéndez que estaba a 300 metros de mi casa. Ese galpón era donde se guardaban los fardos de las estancias José Menéndez y María Behety que se traían para enviar a ventas. Se embarcaban primero a Punta Arenas y después a Europa. En ese galpón había zorras, zorritas y las vías salían del galpón y llegaban hasta el borde del muelle para transbordar al barco. Nosotras íbamos al galpón y cuando las zorras no trabajaban nos subíamos, empujábamos e íbamos y volvíamos ...! ¡Íbamos del galpón al muelle y del muelle al galpón!”.

Un saludo Mingo!
Hernán (Bs. As.)